El problema del estreñimiento en el bebé puede ser más complicado de lo que parece; por lo que es muy importante vigilar su salud intestinal. A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber sobre el tema:
Aprende a identificar el problema
Con un bebé en casa, es importante estar atento a todos los signos, incluidas las heces. El estreñimiento, es bastante común en la infancia y aparecen dolores abdominales, es importante estar atento. Algunas pistas para identificar el problema son el dolor de estómago después de las comidas y las heces con una consistencia más endurecida.
Aunque no parezca tan grave, puede convertirse en una auténtica “bola de nieve”. En algunos casos, es necesario orientar al pediatra sobre la educación de los padres, el uso de laxantes y la orientación psicológica.

¿Cuándo aparece el estreñimiento en el bebé?
Desde la primera semana de vida del recién nacido. Aunque no es común, es importante saber identificar, lo que a veces puede ser una tarea difícil para los padres primerizos. Aunque no existe una frecuencia exacta con la que el bebé puede defecar, la más común es al menos una vez al día, o al menos cada dos días.
¿Cómo identificar el estreñimiento en el bebé?
Es importante estar alerta cuando el bebé no haya defecado durante más de tres días. En algunos casos, estos episodios espaciados pueden ocurrir y normalizarse posteriormente, pero la familia no debe descartar ninguna hipótesis.
¿Cuál es la principal causa de estreñimiento en los bebés?
Cuando el bebé todavía está en lactancia materna exclusiva, las heces tienden a ser más suaves. Si se recurre al uso de fórmulas, pueden resecar más las heces, siendo una de las principales causas del problema. Para sortear la situación, la madre debe mantener al bebé hidratado y hablar con el pediatra de la situación.
¿Que hacer en caso de que el bebé sufra de estreñimiento?
Para aliviar el dolor, los padres pueden darle al bebé un masaje abdominal. Además, como forma de prevención, ¡la lactancia materna es indispensable! También conviene recordar que no se debe descartar la consulta con un pediatra, para recibir la orientación adecuada en todos los casos.
Consejos prácticos para mejorar la salud intestinal del bebé
A partir de los 6 meses, se pueden insertar algunos alimentos en la rutina del bebé para echar una mano al intestino atrapado, como la papaya, naranja con bagazo, ciruela negra, mandarina, repollo, brócoli, espinaca, zanahoria, boniato, remolacha, calabaza, avena y salvado de trigo.
Cabe señalar que no se recomienda el uso de laxantes o tés laxantes para bebés.